El camino al sistema previsional que necesitamos, sin embargo, exige una reforma sustantiva y es innegable que es lo que buena parte de la ciudadanía demanda y merece.
Existen varios tipos de rentabilidad y que cada uno tiene una lectura distinta y que, en el caso de inversiones a largo plazo como las AFP, la rentabilidad varía en el tiempo.
Un mecanismo cuyo valor a largo plazo depende de ser inclusivo, no puede darse el lujo de ser algo menos que simple, de ofrecerle al ciudadano algo que no le permita participar de la manera que más le convenga.
El dinero se pone a disposición de los beneficiarios o herederos del afiliado bajo determinados contextos.